Mujer en una industria tradicionalmente de hombres, la emprendedora Amparo Nalvarte ha sabido hacerse un espacio en el ecosistema de las fintech. Según comenta, cada vez son más las mujeres empoderadas que lideran stratups exitosas.
Hace algunos años, cuando Amparo Nalvarte terminaba la carrera de Administración en la Universidad del Pacífico (UP) y luego se sumergió en el mundo del comercio electrónico. Ahí es donde nació su primera startup, Culqi, una pasarela de pagos que ayuda a los comercios a cobrar por internet, y ahora también en el mundo físico.
“Creamos una fintech sin saber que esa industria existía. Fue todo un reto porque muy pocas personas conocían del mundo de loa pagos, pero tuvimos la suerte de conocer a Pablo Oblitas, un peruano que trabajaba en esa industria en Holanda y nos introdujo a este fascinante mundo”, señala Amparo, mirando el pasado en retrospectiva. Culqi fue un éxito y dinamizó el sector de tal forma que fue comprada en 2018 por Credicorp, el holding financiero más importante del Perú.
Poder femenino
Amparo ha sido reconocida por el Massachusetts Institute of Technology (MIT) como joven innovadora menor de 35 años. Luego de la experiencia exitosa con Culqi decidió convertirse en inversionista de Rextie, la casa de cambios online más grande de Latinoamérica.
Ella supo superar las estructuras tradicionalmente masculinas del sector financiero gracias a su actitud e inteligencia. Comenta que muchas veces era la única mujer en las reuniones. Pero la hacía hacerse notar y aprovechó la oportunidad.
Sin embargo, no siempre era fácil. “Me he encontrado con diferentes casos donde por ser joven y mujer, al inicio no me tomaban en cuenta, pero cuando me escuchaban hablar, el panorama cambiaba totalmente. Son las percepciones de un mundo tradicionalmente machista”, señala Amparo.
En la industria financiera tradicional suele interactuar con altos cargos que son hombres de 50 años a más. En esta cultura comenta que la equidad de género se vive de la boca para afuera. En cambio en las fintech, donde los emprendedores suelen estar en sus treintas, el machismo es infrecuente.
Fintech mindset
Amparo sabe que en el mundo de las fintech las mujeres son también minoría. Por ello siempre impulsa la participación femenina en la industria tecnológica. No obstante cree que las cosas están cambiando poco a poco gracias a un nuevo sistema de creencias y valores que están en el mindset de las nuevas generaciones.
“Ya podemos ver que más de la mitad de fintechs en Perú tienen fundadoras mujeres, y de hecho, Perú lidera en la región en este aspecto. Se están creando nuevas canteras para que cada vez, más mujeres puedan aspirar a puestos más altos y demostrar su talento”, asegura con entusiasmo.
Tras una temprana carrera exitosa, considera que las mujeres como ella se han ganado a pulso el espacio en el mundo financiero. Están abriendo el camino a las nuevas generaciones a un sector más equitativo. No duda en señalar que las mujeres empoderadas no le tienen miedo a los desafíos. “Al contrario, los abrazan y sacan lo mejor de cada reto para su propio aprendizaje”, añade.
Su última aventura es ser co founder de B89, una fintech con un espíritu transformador. Confía en que B89 rompe todos los paradigmas de la banca tradicional, ofreciendo servicios justos, transparentes y 100% digital. De esa manera, espera que más mujeres se sumen al proyecto y emprendan.